Hechos 26 BDO1573
1. Entonces Agrippa dixo à Paulo, Permittesete hablar por ti. Paulo entõces estendiendo la mano, començó à dar razon de ſi, diziendo.
2. Acerca de todas las coſas de que ſoy accusado de los Iudios, ó Rey Agrippa, tẽgome por dichoso deque delante de ti me aya oy de defender.
3. Mayormente sabiendo tu todas las costumbres y questiones que ay entre los Iudios: por loqual te ruego que me oygas cõ paciencia.
4. Mi vida pues desde la mocedad, laqual desde el principio fue en mi naciõ en Ieruſalem, todos los Iudios la saben:
5. Los quales tienen ya conocido, que yo desde el principio, ſi quieren testificarlo, conforme à la mas perfecta secta de nueſtra religion he biuido, Phariseo.
6. Y aora por la eſperança de la promeſſa hecha à nuestros padres ſoy llamado en juyzio:
7. A laqual nuestros doze Tribus, siruiendo perpetuamente de dia y de noche, es peran que han de venir, de laqual eſperança, ô Rey Agrippa, ſoy accusado de los Iudios.
8. Como? Iuzgase coſa increyble entre vosotros que Dios resuscite los muertos?
9. Yo ciertamente auia pensado de hazer contra el nõbre de Iesus el Nazareno muchas coſas contrarias:
10. Loqual tambien hize en Ieruſalem: y yo encerré en carceles à muchos de los Sanctos, recebida potestad de los principes de los Sacerdotes: y quando eran matados, yo di mi voro.
11. Y muchas vezes por las Synogas puniendolos, los forcé à blasphemar: y enfu recido ſobre manera contra ellos los persegui haſta en las ciudades estrañas.
12. Donde aun yendo à Damasco cõ potestad y cõmission de los Principes de los Sacerdotes.
13. En mitad del dia, o Rey, vide en el camino vna luz que ſobrepujaua el resplandor der Sol, laqual me rodeó, y à los que yuan commigo.
14. Y auiendo caydo todos noſotros en tierra, oy vna boz que me hablaua y dezia en lengua Hebrayca, Saulo, Saulo, porque me persigues? Dura coſa te es dar coces contra los aguijones.
15. Yo entonces dixe, Quien eres Señor? Y el dixo, Yo ſoy Iesus a quien tu persigues.
16. Mas leuantate y ponte ſobre tus pies: porque por eſſo tehe apparecido para ponerte por ministro y teſtigo de las coſas que has viſto, y de las que te mostraré.
17. Librandote de eſte pueblo y de las Gẽtes à las quales aora te embio:
18. Paraque abras ſus ojos: para que ſe cõ uiertan de las tinieblas à la luz: y de la potestad de Satana à Dios: para que reciban por la fe, que es en mi, remiſsion de peccados, y fuerte entre los Sanctificados.
19. Por loqual, o Rey Agrippa, no fue rebelle à la vision celestial.
20. Antes, primeramente à los que estã en Damasco, y Ieruſalem, y portoda la tierra de Iudea: y à las Gentes, annunciaua que ſe emmẽdaſſen, y ſe conuirtieſſen à Dios haziendo obras dignas de conuersion.
21. Por cauſa deesto los Iudios tomandome en el Templo, tentaron de matarme.
22. Mas ayudado del ayuda de Dios perseuêro haſta el dia de oy, dãdo testimonio à chicos y à grandes: no diziendo nada fuera de las coſas que los Prophetas, y Moyſen, dixeron que auian de venir.
23. Que el Chriſto auia de padecer, Que auia de ſer el primero de la resurrecion de los muertos, Que auia de annunciar luz à eſte pueblo, y à las Gentes.
24. Y diziendo el estas coſas, [y dando razon de ſi] Festo à grã boz dixo, Estás loco Paulo: las muchas letras te tornan loco.
25. Y Paulo, No estoy loco, dize, Excellẽte Festo, ſino hablo palabra de verdad y de templança.
26. Porque el Rey sabe estas coſas, delante del qual tambien hablo constantemente. Porque no pienso que ignora nada deesto. que eſto no ha sido hecho por rincones.
27. Crees Rey Agrippa à los Prophetas? Yo sé que crees.
28. Entonces Agrippa dixo à Paulo, Por poco me persuadirás que me haga Christiano.
29. Y Paulo dixo, Deſſeo delãte de Dios que por poco y por mucho, no solamente tu, mas tãbien todos losque oy me oyen, fuessedes hechos tales qual yo ſoy, ſacadas estas prisiones.
30. Y como vuo dicho estas coſas, leuantose el rey y el Presidente y Bernice, y losque ſe auian aſſentado con ellos.
31. Y como ſe apartaron à parte, hablauan los vnos con los otros, diziendo, Que ninguna coſa digna ni de muerte, ni de prisiõ haze eſte hombre.
32. Y Agrippa dixo à Festo, Podia eſte hõbre ſer suelto, ſi no vuiera appelado para Cesar.