Job 29 DHHS94
1 2. ¡Ojalá pudiera yo volver a aquellos tiempos en que Dios me protegía!
3. Cuando él me iluminaba con su luz y yo podía andar en la oscuridad;
4. cuando yo estaba en plena madurez y Dios cuidaba de mi hogar;
5. cuando el Todopoderoso estaba a mi lado y mis hijos me hacían compañía;
6. cuando la leche corría por el suelo y el aceite brotaba de las rocas;
7. cuando yo tomaba asiento en el lugar de reunión de la ciudad.
8. Los jóvenes, al verme, se hacían a un lado y los ancianos se ponían de pie.
9. Aun los hombres importantes dejaban de hablar y hacían señas de guardar silencio.
10. Los gobernantes bajaban la voz; se les pegaba la lengua al paladar.
11. La gente, al verme o escucharme, me felicitaba y hablaba bien de mí,
12. pues yo socorría al huérfano y al pobre, gente a la que nadie ayudaba.
13. El que estaba en la ruina me daba las gracias; mi ayuda era a las viudas motivo de alegría.
14. La justicia y la honradez eran parte de mí mismo: eran mi ropa de todos los días.
15. ¡Yo era ojos para el ciego y pies para el lisiado,
16. padre de los necesitados y defensor de los extranjeros!
17. Yo les rompía la quijada a los malvados y les quitaba la presa de los dientes.
18. Yo pensaba: «Mis días serán tantos como la arena; moriré anciano y en mi propio hogar.
19. Soy como un árbol plantado junto al agua, cuyas ramas baña el rocío de la noche.
20. Mi esplendor se renovará conmigo, y no me faltarán las fuerzas.»
21. Todos me escuchaban y esperaban en silencio mis consejos.
22. Después de hablar yo, ninguno replicaba. Mis palabras caían gota a gota sobre ellos,
23. y ellos las esperaban ansiosos, como se espera la lluvia en tiempo de calor.
24. Cuando yo les sonreía, apenas lo creían, y no dejaban de mirar mi rostro alegre.
25. Yo establecía mi autoridad sobre ellos y decidía lo que ellos debían hacer, como un rey al frente de sus tropas. Cuando estaban tristes, yo los consolaba.