Logo
🔍

San Marcos 13 BDO1573

« ES el mismo argumento y diſpoſicion del cap. 24. de S, Mattheo.

1. Y Saliendo del Templo, dizele, vno de ſus Diſcipulos, Maestro, mira que piedras, y que edificios.

2. Y IESVS respondiendo dixole, Vees estos grandes edificios? no quedará piedra ſobre piedra que no ſea derribada.

3. Y sentandoſe en el Monte de las Oliuas delante del Templo, preguntaronle à parte Pedro, y Iacobo, y Ioan, y Andres.

4. Di nos, quando serán estas coſas? Y que señal aurá quando todas las coſas han de ſer acabadas?

5. Y IESVS respondiendoles, començó à dezir, Mirad que nadie os engañe.

6. Porque vẽdrán muchos en mi nombre, diziendo, Yo ſoy el Chriſto: y engañarán à muchos.

7. Mas quando oyerdes de guerras, y de rumores de guerras, no os turbey: porque conuiene hazerse anſi. mas aũ no sera la fin.

8. Porque gente ſe leuantara contra gente, y reyno contra reyno: y aurá terremotos en cada lugar, y aura hambres, y alborotos: principios de dolores serán estos.

9. Mas vosotros mirad por vosotros: porque os entregarán en cõsejos, y en synogas: ſe reys açotados: y delante de presidentes y de reyes sereys llamados por cauſa de mi por testimonio à ellos.

10. Y en todas las gentes cõuiene que el Euangelio ſea predicado antes.

11. Y quando os truxeren entregãdo os, no premediteys que aueys de dezir, ni lo pẽseys: mas loque os fuere dado en aquella hora, eſſo hablad. porque no soys vosotros losque hablays, ſi no el Eſpiritu Sancto.

12. Y entregará à la muerte el hermano àl hermano, y el padre àl hijo: y leuantarsehán los hijos contra los padres, y matarloshan.

13. Y sereys aborrecidos de todos por mi nombre: MAS EL QVE PERSEVERARE HASTA LA FIN, ESTE SERA SALVO.

14. Empero quando vierdes la abominacion de aſſolamiento, [que fué dicha por Daniel,] que estará donde no deue, el que lee, entien da, entõces losque estuuieren en Iudea, huygan à los montes.

15. Y elque estuuiere ſobre la caſa, no deciẽ da à la caſa: ni entre para tomar algo de ſu caſa.

16. Y elque estuuiere en el campo, no torne atràs ni aun à tomar ſu capa.

17. Mas ay de las preñadas, y de las que criáren en aquellos dias.

18. Orad pues que no acontezca vuestra huyda en inuierno. [ò en Sabbado.]

19. Porque ſeran aquellos dias vna aflicion, qual nũca fué desde el principio de la Creacion de las coſas que crió Dios, haſta eſte tiẽ po, ni ſerá.

20. Y ſi el Señor no ouieſſe acortado aquellos dias, ninguna carne ſe saluaria. mas por cauſa de los Escogidos, que el eſcogió, acortó aquellos dias.

21. Y entonces ſi alguno os dixere, Heaqui, aqui eſtá el Chriſto, ò heaqui, alli eſtá, no lo creays.

22. Porque ſe leuantarán falsos Christos y falsos prophetas: y darán ſeñales y prodigros para engañar, ſi ſe pudieſſe hazer, aũ à los escogidos.

23. Mas vosotros mirad: heaqui os lohe dicho antes todo.

24. Empero en aquellos dias, deſpues de aquella aflicion, el Sol ſe escurecerá, y la Luna no dará ſu resplandor.

25. Y las eſtrellas caeran del cielo, y las virtudes que eſtan en los cielos ſeran commouidas.

26. Y entonces verán àl Hijo del hõbre que vendrá en las nuues con mucha potestad y gloria.

27. Y entonces embiará ſus Angeles, y jũtará ſus Escogidos de los quatro vientos, desde el vn cabo de la tierra haſta el cabo del cielo.

28. De la higuera aprended la ſemejança: Quãdo ſu rama ya ſe haze tierna, y brota hojas, conoceys que el verano eſtá cerca:

29. Ansi tambien vosotros quando vierdes hazerse estas coſas, conoced que eſtá cerca, à las puertas.

30. Decierto os digo que no paſſarâ eſta generacion, que todas estas coſas no ſean hechas.

31. El cielo y la tierra paſſarán, mas mis palabras nunca paſſarán.

32. Empero de aquel dia y de la hora, nadie sabe, ni aun los Angeles que eſtan en el cielo, ni el mismo Hijo, ſi no solo el Padre.

33. Mirad, velad y orad: porque nosabeys quando ſerá el tiempo.

34. Como el hombre que partiendoſe lexos, dexó ſu caſa, y dió à ſus sieruos ſu hazienda, y à cada vno ſu cargo, y àl portero mandó que velaſſe:

35. Velad pues, porque no sabeys quando el Señor de la caſa vendrá, à la tarde, ò à la media noche, ò àl canto del gallo, ò à la mañana.

36. Porque quãdo viniere de repente, no os halle durmiendo.

37. Y las coſas que à vosotros digo, à todos las digo, Velad.

»