San Mateo 13 BDO1573
1. Y aquel dia, ſaliendo Iesus de caſa, sentóse junto à la mat:
2. Y allegaronfe à el muchas copañas; y entrandoſe el en vn nauio, sentóse, y toda la compaña eſtaua à la ribera.
3. Y habloles muchas coſas por parabolas, diziendo, Heaqui el que fembraua, ſalió à sembrar.
4. Y fembrando, parte de la ſimiente cayó junto al camino: y vinieron las aues, y comieronla.
5. Y parte cayó en pedregales, donde notenia mucha tierra, y nació luego, porque no tenia tierra profunda:
6. Mas en ſaliendo el Sol, ſe quemó, y secóse: porque no tenia rayz.
7. Y parte cayó en espinas: y las espinas crecieron, y ahogaronla.
8. Y parte cayó en buena tierra, y dió fruto. vno de á ciento, yotro de à sesenta, y otro de à treynta.
9. Quien tiene oydos para oyr, oyga.
10. Entonces llegandoſe los Diſcipulos, dixerõle: Porque les hablas por parabolas?
11. Y el respondiendo, dixoles, Porque à vosotros es cõcedido ſaber los mysterios del Reyno de los cielos: mas à ellos no es concedido.
12. Porque qualquiera que tiene, serleha dado, y tẽ drámas: mas elque no tiene, aun loque tiene le ſerá quitado.
13. Por eſſo les hablo por parabolas; porque viendo no veen, y oyendo no oyen, ni entendien.
14. Demanera que ſe cumple en ellos la prophecia de Isaias, que dize, De oydo oy reys, y no entendereys. y viendo vereys, y no mirareys.
15. Porque el coraçon deste pueblo eſtá engroſſado, y de los oydos oyẽ pesadamẽte, y de ſus ojos guiñã: porque no vean de los ojos, y oygan de los oydos, y del coraçon entiendan, y ſe conuiertan, y yo los sane.
16. Mas bienauenturados vuestros ojos, porque veen: y vuestros oydos, porque oyẽ.
17. Porque decierto os digo, que muchos prophetas y juſtos dessearonver loque vosotros veys; y no lo vierõ: y oyr loque vosotros oys, y no lo oyeron.
18. Oyd pues vosotros la parabola del que siembra.
19. Oyendo qualquiera la Palabra del Reyno, y no entẽdiendo la, viene él Malo, y arrebata loque fue sembrado en ſu coraçõ. Este es él que fue fembrado jũto àl camino.
20. Y elque fue fembrado en pedregales. eſte es elque oye la palabra, y luego la recibe con gezo.
21. Mas no tiene rayz en ſi, antes es temporal: que venida la aflicion, ò la persecucion por la Palabra, luego ſe offende.
22. Y el que fué fembrado en espinas, eſte es el que oye la Palabra: mas la congoxa deste ſiglo, y el engaño de las riquezas ahoga la Palabra, y hazeſe ſin fruto.
23. Mas el que fué sembrado en buena tierra, eſte es el que oye y entien de la Palabra, y el que lleua el fruto: y lleua vno à ciento, y otro á sesenta, y otro à treynta.
24. Otra parabola les propuso, diziendo, El Reyno de los cielos es semejante àl hombre que siembra buena ſimiente en ſu haça:
25. Mas durmiendo los hombres, vino ſu enemigo, y fembró Zizania entre el trigo, y fueſe.
26. Y como la yerua ſalió, y hizo fruto, entonces la zizania pareció tambien.
27. Y llegandoſe los sieruos del padre de la familia, dixeronle, Señor, no sembraste buena ſimiente en tu haça? Pues dedonde tiene zizania?
28. Y el les dixo, El enemigo hõbre ha hecho eſto. Y los sieruos le dixeron, Pues quieres que vamos y la cojamos?
29. Y el dixo, No: porque cogiendo la zizania, no arranqueys tambien con ella el trigo.
30. Dexad crecer juntamente lo vno y lo otro haſta la siega, y àl tiempo de la siega yo dire à los segadores, Coged primero la zizania, y atalda en manojos para quemar la: mas el trigo allegaldo en mi alholi.
31. Otra parabola les propuso, diziẽdo, El Reyno de los cielos es semejante àl grano de mostaza, que tomandolo alguno lo sembró en ſu haça.
32. Elqual à la verdad es el mas pequeño de todas las ſimientes: mas quando hà crecido, es el mayor de todas las hortalizas: y hazeſe arbol, que vienen las aues del cielo y hazen nidos en ſus ramas.
33. Otra parabola les dixo, El reyno de los cielos es semejante à la leuadura, que tomandola la muger, la esconde en tres medidas de harina, haſta que todo ſe leude.
34. Todo eſto habló Iesus por parabolas à las compañas: Y nada les habló ſin parabolas:
35. Paraque ſe cũplieſſe loque fué dicho por el Propheta, que dixo, Abriré en parabolas mi boca: regoldaré coſas escondidas desde la fundacion del mundo.
36. Entonces, embiadas las compañas, IESVS ſe vino à caſa: Y llegandoſe à el ſus discipulos, dixeronle: Declaranos la parabola de la zizania de la haça.
37. Y respondiendo el, dixoles, El que siembra buena ſimientees el Hijo de hombre.
38. Y la haça es el mundo. Y la buena ſimiente, estos ſon los hijos del Reyno. Y la zizania ſon los hijos del Malo.
39. Y el enemigo que la sembró, es el diablo. Y la siega es la fin del mundo. Y los segadores ſon los Angeles.
40. De manera que como es cogida la zizania, y quemada à fuego, anſi ſerá en la fin deste ſiglo.
41. Embiará el Hijo del hombre ſus Angeles, y cogerán de ſu Reyno todos los estoruos, y los que hazen iniquidad:
42. Y echarlos han en el horno de fuego: alli ſerá el lloro, y el batimiento de dientes.
43. Entonces los juſtos resplãdecerán, como el Sol, en el Reyno de ſu Padre. El que tiene oydos para oyr, oyga.
44. Item, El Reyno de los cielos es semejante àl thesoro escondido en la haça: el qual hallado, el hombre lo encubre: y de gozó deel, vá, y vende todo loque tiene, y compra aquella haça.
45. Item, el Reyno de los cielos es semejante àl hombre tratante que buſca bue nas perlas.
46. Que hallando vna preciosa perla, fué, y vendió todo loque tenia, y compróla.
47. Item, El Reyno de los cielos es semejante à la red, que echada en la mar, coge de todas fuertes.
48. Laqual ſiendo llena, sacaronla à la orilla: Y sentados cogieron lo bueno en vaſos, y lo malo echaron fuera.
49. Ansi ſerá en la fin del ſiglo: saldrán los Angeles, y apartaran à los malos de entre los juſtos:
50. Y echarloshan en el horno de fuego: alli ſerá el lloro, y el batimiento de dientes.
51. Dizeles IESVS, Aueys entendido todas estas coſas? Ellos responden, Si Señor.
52. Y el les dixo, Por eſſo todo escriba docto en el Reyno de los cielos es semejante à vn padre de familiá, que saca de ſu thesoro coſas nueuas y coſas viejas.
53. Y acõteció que acabando IESVS estas parabolas, paſſó de alli.
54. Y venido à ſu tierra, enseñolos en la synoga dellos, que ellos eſtauan fuera de ſi, y dezian, De donde tiene eſte eſta sabi duria y estas marauillas?
55. No es eſte el hijo del carpintero? No ſe llama ſu madre Maria: y ſus hermanos, Iacobo, y Ioses, y Simon, y Iudas?
56. Y no eſtan todas ſus hermanas con noſotros? Dedonde pues tiene eſte todo eſto?
57. Y escandalizauanse en el. Mas IESVS les dixo, No ay propheta ſin honrra ſi no en ſu tierra y en ſu caſa.
58. Y no hizo alli muchas marauillas, à cauſa de la incredulidad dellos.